Un punto más, un punto menos
Empate ramplón el vivido
en el Reyno de Navarra entre Osasuna y Getafe. Los rojillos tuvieron
más ambición, pero no fue suficiente para derrotar a los pupilos de
Luís García.
¿Vaso medio lleno o
medio vacío? Si el objetivo es la permanencia, siempre es bueno
puntuar. Si se quiere soñar con algo más ambicioso, Osasuna dejó
escapar una oportunidad de oro para dormir en Champions.
No hay mejor resumen de
un partido que el de un entrenador y el técnico del Getafe fue
claro: “El partido ha sido igualado, excepto los últimos minutos
que han sido mejor ellos”.
Desde los primeros
compases del encuentro ambos equipos enseñaron sus cartas. Las
órdenes las tenían bien aprendidas: no arriesgar e intentar
aprovechar las ocasiones. El problema viene cuando tienes
oportunidades y no las materializas. Eso es lo que le pasó a
Osasuna.
La primera mitad fue
soporífera y, únicamente, se supo que había fútbol porque la
afición rojilla no paró de animar. El Cata Díaz y Raúl García
tuvieron en su cabeza el gol pero, en ambos casos, los remates no
vieron portería. Asímismo, Nino pudo adelantar a los locales pero
se topó con Moyá. El portero azulón fue el mejor del partido y el
culpable de que Osasuna no se llevara un botín mayor.
El paso por vestuarios
despertó al cuadro navarro que empezó a desnivelar la balanza a su
favor. De nuevo Nino, tras una gran asistencia de tacón de Lamah, se
topaba con Moyá. Mientras tanto el Getafe se limitaba a poner a
prueba a Andrés Fernández con tiros lejanos sin peligro.
Mendilíbar no esperó
más y sacó a Lekic. El ariete serbio volvía a una convocatoria
tras su reciente paso por el quirófano y la grada le recibió puesta
en pie. La premisa era clara.
A partir de este momento,
el fútbol fue muy directo. Osasuna se puso las pilas e hizo daño al
Getafe con su mejor arma, el juego aéreo. Los rojillos no se
cansaron de colgar balones al área buscando a su gigante balcánico,
pero nunca lo encontraron.
Sin embargo la mejor
ocasión llegaría con un zurdado de Raúl García en las
postremidades del partido que hizo volar a Moyá para enviar la
pelota a córner. Aquí murió el encuentro.
Con este 0-0, Osasuna se
convierte en el rey del empate (13) y sigue subido en el tren de
Europa. Por su parte, el Getafe se mantiene en la zona noble de la
tabla.
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