Real Madrid 7 - 1 Osasuna

El Madrid le hace un siete a Osasuna

El día y la hora del partido podían augurar que se produjera un segundo chupinazo en el 2011. El lugar no iba a ser la Plaza del Ayuntamiento de Pamplona, sino el estadio Santiago Bernabéu. Pero lejos de la realidad el Real Madrid vapuleó a un débil Osasuna marcado por la cantidad de bajas que tenía. El parte médico era más propio de un parte de guerra que el de una plantilla de fútbol.

Ibra celebra con rabia el empate. Foto: DDN

Por todo ello, no le quedó otra a Mendilíbar que convocar a tres jugadores del filial: los defensas Eneko Satrústegui y Marcos Pérez y al delantero Manuel Onwu. "No queríais cantera, ahí la tenéis". 

El once que presentó Osasuna fue el formado por: Andrés Fernández, Damiá, Miguel Flaño, Lolo, Satrústegui, Puñal, Nekounam, Raúl García, Calleja, Ibrahima y Nino. Defensa totalmente nueva esta temporada.

Mientras tanto Mourinho sacó a su once de gala con Casillas, Ramos, Xabi, Cristiano y compañía. Un reto difícil, por no decir utópico.

El cuadro rojillo plantó cara a los blancos durante media hora, tiempo suficiente para que Cristiano no faltase con su cita al gol, Ibrahima empatara con un gol de pillo y Pepe pusiera el 2-1 en la siguiente jugada. Este gol psicológico del central portugués fue una losa demasiado pesada que tumbó a Osasuna.

A partir de ahí, El Real Madrid se puso el traje de faena y barrió a Osasuna en todos los aspectos. A 5 minutos del descanso, Higuaín anotó el 3-1, había que tirar de épica.

Tras la salida de vestuarios, Osasuna aún tuvo valor para apretar y poner en alerta a la retaguardia blanca. Sin embargo, un claro penalty de Eneko Satrústegui y posterior roja mataron el partido. Cristiano no falló desde los 11 metros. 4-1. 

Los rojillos pedían la hora pero quedaba todavía media hora por delante. Cristiano hizo el tercero en su cuenta particular y la manita planeaba sobre el feudo blanco. Lejos de tranquilizarse, el Real Madrid siguió buscando el gol y lo encontró por medio del doblete de Karim Benzemá. 7-1.

Osasuna sigue siendo presa fácil para los grandes aunque hay que recordar que ésta no es nuestra Liga. Ahora tiempo de descanso para recuperar efectivos y pensar desde ya en el Rayo Vallecano.

¡Aúpa Osasuna!

Getafe 2 - 2 Osasuna

“Pudo ir mejor...y peor"

Osasuna sumó un punto en su visita al Coliseum Alfonso Pérez. Si partimos de que el conjunto rojillo fue por delante en el marcador en dos ocasiones, el punto nos puede saber a poco. Si, por el contrario, viste el partido y, sobre todo, el arreón final azulón, el punto es bueno. Además, hay que considerar que el Coliseum no es un campo propicio para Osasuna.

Mendilibar apostó por el mismo once que goleó al Zaragoza y para los siete minutos, Ibrahima ya se había estrenado con la zamarra rojilla. Un centro, sin aparente peligro, fue suficiente para que el ex del Numancia anotara el primero de cabeza. Este gol no hubiera sido posible sin la colaboración del meta local Moyá que se resbaló en el peor momento posible. 

A partir de ahí, Osasuna se echó atrás en busca de alguna contra letal que no llegó. Para los 26 minutos, Mendilibar mandó a la ducha a Cejudo que anda últimamente un poco perdido. Su sustituto fue Damia. Este cambio demuestra una vez más que al de Zaldivar no le tiembla en pulso a la hora de "señalar" a algún jugador.

Al descanso se llegó con victoria visitante. Casi sin querer, Osasuna mandaba en el marcador. Pero tras la salida de vestuarios llegó el empanamiento de la defensa rojilla. Guiza puso el empate tras cazar un rechace en la frontal del área. 

Osasuna, lejos de amilanarse, consiguió voltear el marcador en la jugada siguiente. Un centro medido de Raúl García fue aprovechado por Ibrahima que con un tremento testarazo puso el 1-2. Mismos jugadores, mismo resultado. 

El Getafe veía las orejas al lobo y sacó a toda su artillería pesada. Como consecuencia, de nuevo Guiza equilibró el partido al rematar completamente sólo un buen centro de Miguel Torres. Quedaban 15 minutos y todo por decidir. Finalmente no pasó lo de siempre y Osasuna consiguió un apetitoso punto.

Ahora toca vestirse de gala para recibir al líder en solitario de la Liga BBVA, el equipo granota dirigido por Juan Ignacio Martínez. Será el domingo a las 16:00, un horario poco propicio para los navarros, pero por Osasuna uno puede sacrificar la siesta.