Raúl bien vale un Reyno
Osasuna se afianza en la sexta posición
tras derrotar a un flojo Espanyol por 2-0. Raúl García, con su
doblete, fue suficiente para cortar las alas a unos periquitos que
acabaron el partido con nueve.
No hay mejor forma que reconciliarse
con tu parroquia que vencer a un rival directo. Osasuna saldó una
cuenta pendiente tras su humillación en Vallecas y continúa soñando
con Europa. Por su parte, el Espanyol se estanca con 42 puntos a
falta de finalizar la jornada.
El Reyno esperaba con expectación qué
versión de Osasuna se iba a ver. Así, el ambiente estuvo frío y
enrarecido en los primeros compases del encuentro. Uche aumentó el
murmullo al fallar un gol a puerta vacía nada más comenzar el
partido.
A Osasuna le costó adaptarse más de
lo habitual y el Espanyol campaba a sus anchas por el fortín
rojillo. No fue hasta el minuto 20 cuando los de Mendilibar dieron el
primer aviso. Centro de Raúl García que remata de forma acrobática
Lamah y Casilla ataja sin dificultades.
Ésta jugada despertó al Reyno que
comenzó a rugir como en las citas importantes. Osasuna fue ganando
terreno con el paso de los minutos y Raúl García, en dos ocasiones,
pudo desequilibrar la balanza. Primero, con una falta lateral botada
por Puñal para que el ex del Atlético rematara al palo. De nuevo,
una falta colgada al área por el capitán fue aprovechada por Raúl
García para inquietar la meta perica. Se llegaba al tercio de
partido y Osasuna enseñaba sus armas.
Los últimos minutos de la primera
parte sirvieron para que el Espanyol se cargara de tarjetas, algo que
en la segunda mitad iba a ser decisivo. Mientras tanto, los rojillos
seguían intentándolo a base de tiros lejanos.
Ajustando la mira
En el segundo asalto, Osasuna salió en
tromba y metió en su campo a un pobre Espanyol. Los pericos echaron
en falta a Verdú, Sergio García, Coutinho y Uche que deambulaban
por el Reyno sin pólvora. En el minuto 50, pudo cambiar el rumbo del
partido si Cristian Gómez hubiera acertado a rematar un buen centro
de Baena.
En el mundo del fútbol si perdonas lo
acabas pagando y, en la siguiente jugada, Osasuna hizo el primero de
la tarde. Centro de Lolo desde la derecha y Raúl García, de volea,
la cruza para batir a Casilla. Golazo del 14 y octavo en su cuenta
particular.
El Espanyol quedó tocado con el gol y
agonizó cuando Coutinho vio, de forma absurda, la segunda tarjeta
amarilla al desplazar el balón en una falta rojilla. En este
momento, el Espanyol estaba contra las cuerdas.
Osasuna sabía que tenía que cerrar el
partido para no dar ningún disgusto a su afición y se puso el mono
de trabajo. Mientras tanto, Pochettino movía ficha al sacar a Weiss
por un lesionado Sergio García.
A falta de 20 minutos llegó la
sentencia rojilla. Raúl García controla dentro del área y se saca
de la chistera una vaselina inalcanzable para Casilla. Segundo gol de
Osasuna, segundo del centrocampista zizurtarra que está en su mejor
temporada. Nueve goles y ocho asistencias lleva el navarro.
A partir de aquí, los de Mendilibar
llevaron el partido a su terreno y el Espanyol apenas inquietó a un
Andrés Fernández que fue un mero espectador. El partido entraba en
sus minutos finales y todo estaba decidido. Aún tuvo tiempo el
colegiado para mostrar la segunda tarjeta a Forlín, ésta por sacar
el brazo a pasear en un salto con Raúl García. Osasuna no iba a
fallar en su Reyno e iba a poseer, una semana más, las llaves de
Europa.
Los rojillos volvieron a la senda del
triunfo tras encajar 11 goles en dos partidos. El Reyno de Navarra es
una fortaleza invencible regida por Raúl García y compañía. Por
su parte, el Espanyol se aleja de Europa con esta justa derrota.